22. EL MIEDO - 20 DE AGOSTO
A. REsumen.
El Sacro, es el generador de todas las emociones, por esta razón, es también donde mayor distorsión hay, aquí se acumulan una gran cantidad de emociones densas, que se suelen ocultar en las sombras por miedo a enfrentarlas.
Y será muy difícil asimilarlas, si únicamente te enfocas en ver el daño que una persona provoca sin mirar al niño dañado que hay en su interior”. Una persona violenta es producto de un entorno violento, un abusador es producto de un abuso, un pederasta es producto de una represión, un tirano es producto de la falta de poder interior, un conflictivo es producto de un conflicto. Lo que haces es juzgar el fruto del árbol cuando el problema es la degradación del suelo.
Cada vez que le dices a un niño lo que está bien y lo que está mal, creas una escala de valores que lo reprime, imponiendo una visión externa del mundo sobre él. Este niño en el futuro tratará sobrevivir imitando. A veces no se dan cuenta de cuánto daño causan a alguien diciéndole: “no vas a poder, cállate, estás equivocado, eres un inútil, no seas tonto, lo haces mal…” Un niño hambriento puede crear una guerra de tribus que genere más hambre. Un niño sin amor puede librar una revolución de odio. Un niño que se sintió estafado puede convertirse en un corrupto y Un artista frustrado puede terminar creando un genocidio. ¿Te suena?
No hay que perdonar las atrocidades que han realizado, hay que abrazar a esos niños para que sanen su dolor, mirarlos a los ojos y tener compasión pues un niño reprimido emocionalmente no podrá expresarse de adulto y provocará dolor a su alrededor
Volvamos a entender que la oscuridad es la distorsión de la luz. Es la disonancia de la vibración armónica. Es la ruptura de los patrones y los nudos en la red de la matríz. Todos surgen de la expresión de lo interno o negativo hacia lo externo o positivo. Ambos crean las polaridades que se expresan en miles de formas, pero a veces, se alteran, se sobrecargan de energía, colapsan y explotan, creando caos. Cada persona es como una batería con un enorme potencial de iluminar su entorno, pero si esa batería genera mucha energía y nunca tiene la posibilidad de expresar esa luz, toda su potencia buscará una salida, y sin medir las consecuencias, creará caos y destrucción.
Esas personas que hacen tanto daño a la humanidad, son niños con un gran potencial que no ha sido canalizado correctamente. La tarea de los que están a su alrededor, es llevarlos de nuevo al Equilibrio, balancear su positivo y negativo, “ajustando” las polaridades. Ajustar viene de la palabra “Justo”, que da origen a la palabra y concepto de la “Justicia”. El problema radica en lo que llamas equidad, ley o justicia, pues cambia de acuerdo a la cultura, al momento, y a la interpretación del entorno.
Por ejemplo: La esclavitud era legal, tener a una mujer como propiedad era legal, que los niños trabajen en fábricas y minas era legal, casarse con menores de edad era legal, Y aún en varios países todo esto no ha cambiado. Entonces lo que define la justicia es la moral y la moral es un producto de la cultura. Todo lo que hacen y enjuician está medido con la vara de su propia perspectiva. Lo que tú consideras inmoral para otros es lo natural. En varios periodos de la historia, al menos entre el año 34 hasta el año 1900, los cristianos seguían luchando en guerras donde estaba bien matar a los herejes en nombre de Dios. Incluso pensaban que los indígenas no tenían alma. Durante el periodo Vikingo, los nórdicos consideraban que la única forma de llegar a Valhalla con Odín era en una batalla, luchando y matando. Los terroristas islámicos creen que, cometiendo un acto de terror, Alá les esperará con muchas vírgenes en los cielos como premio por su valentía. Creen que castigar al al malo los hace justos, pues han hecho sufrir al que hizo sufrir. Por esto, hablar de Justicia es un acto de premio y castigo, siempre dependerá de la perspectiva.
Por ello, no hay que hacer justicia sino “Ajustar”, es decir corregir el positivo y el negativo en esas personas. El primer paso es hacerlo contigo mismo. Júzgate. mírate al espejo, piensa en todo lo malo que has hecho desde que eras bebé. Seguramente has hecho cosas que no debías desde la perspectiva de tu moral actual. Ahora preguntate, las volverías a hacer hoy, Seguramente tu respuesta es No, Esto significa que has aprendido, lo cual implica que se puede cambiar, transformar, trascender.
Ahora pregúntate cómo los has aprendido. Probablemente dirás que te lo han hecho ver, o que regañaron, inclusive pudieron haberte castigado. Muchas veces esto genera un resentimiento
Pero hay una pregunta debes hacerte ¿Por qué eso está mal? Su respuesta es la única que realmente te libera del pesar. El castigo te condiciona. Pero Cuestionarte a ti mismo te lleva al entendimiento, pues no sabías lo que era justo. Las personas que actúan con malicia, no conocen otra forma. Educar es mostrarles una forma diferente de hacerlo, esto es fundamental. El sistema de castigo no funciona, pues genera sólo represión y contrapone a las personas por que no se entienden. La forma de hacer justicia es educando en lugar de castigar. El juicio que poseen los humanos implica separar y señalar: “Aquel lo hace mal”, por ende, “yo lo hago bien”. Si lo que buscas es generar paz, armonía y trascender este sistema distorsionado en el que vives, entonces busca otras herramientas, no uses las mismas. No puedes cambiar el mundo con los mismos métodos con que creaste este. La educación y el servicio son las claves.
La forma de hacer justicia es ajustando lo negativo y lo positivo, así el que ha matado debe ayudar a traer vida, aquel que ha apresado debe ayudar a liberar, aquél que ha robado debe ayudar a construir y encontrar la satisfacción en el trabajo bien hecho, aquel que ha abusado debe cuidar de otros y sentirse útil y amado, aquel que ha controlado debe realizar tareas en equipo y encontrar la alegría en el grupo, aquél que ha provocado hambre debe cocinar para otros y sentir el agradecimiento del hambriento. La única forma de transformar a un inútil es haciéndolo útil. Ajustando su conflicto en pro del servicio común. Nadie le ha devuelto a la sociedad lo que le ha quitado estando encerrado en una jaula como castigo.
La energía de la voluntad canalizada hacia la construcción, es lo único que corrige, ajusta. Pero en tanto en la casa los padres hagan competir a los hermanos, en tanto en las escuelas los maestros hagan competir a los alumnos, en el trabajo los jefes hagan competir a los trabajadores, en la sociedad los líderes deban competir para obtener poder, el sistema estará basado siempre en el Miedo y, por lo tanto, en la injusticia. Pues el humano enjuicia lo que teme. Lo que siente que puede matarlo, aquello que no puede controlar, lo que no entiende, lo que se escapa de sus manos, lo que se puede volver en su contra, todo eso es Miedo. Y no solo pasa a nivel social, aún es peor en cada persona. Culturalmente, los humanos fueron castrados, sus genitales fueron apresados, reprimiendo toda potencialidad, limitándola a través del miedo, bañando de moralidades el motor de la vida y la transformación. La mayoría de los conflictos humanos provienen de la propia injusticia sobre la energía de sus genitales. Pues En los genitales se encuentra la capacidad de crear, así como la fuerza para defenderse, la voluntad de salir adelante y seguir firmes en el mundo. El fruto de la vida proviene de la energía de los genitales, Pero apresada por la moralidad se convierte en miedo, pues toda lucha y fuerza de supervivencia proviene de la testosterona producida en los testículos y los ovarios, como en los animales que pelean por aparearse; toda lucha de poder nace del miedo a perder, a morir, a no trascender.
La sociedad trató de controlar esto mediante la represión sexual y la moral, haciendo que este conflicto pasase a los chakras superiores, invadiendo la mente, el corazón y el plexo, convirtiendo la lucha de la potencia interna en una lucha social de unos contra otros, de ideas e intenciones. Cuando la testosterona no cumple su libre función genital, sube a la cabeza, convirtiendo a un genio en un tirano. Todo este actuar se basa en el miedo desde el inconsciente pues el Inconsciente Reacciona, el Consciente Acciona. La diferencia está en que el primero toma acción y energía de una fuerza externa y opuesta que le impulsa a moverse. No tiene fuerza propia, es el entorno el que dicta qué pensar, qué creer, qué temer.
El miedo es la primera emoción de la naturaleza, el que da forma a toda su escala de valores, es el cimiento de la cultura y la civilización. Es el que dirige lo qué está bien y lo qué está mal. El miedo, pues, es útil, ya que gracias a él no saltan a un abismo ni empujan a otro por miedo a las consecuencias. Por la tanto es un mecanismo perfecto para la supervivencia y el orden, por esto mismo aquellos que se distorsionan y desajustan utilizan el miedo para controlar a los demás, es lo más fácil. Crear enemigos visibles o invisibles, crear conspiraciones, siempre es el mismo mecanismo.
Que No se malentienda, no hay que liberase del miedo. El miedo es muy útil, el miedo te hace ser quién eres, ha construido en cada célula de tu ser, le debes todo al miedo. Más bien hay que vivir el miedo desde la Consciencia. El miedo es una emoción útil que ayuda a seguir, a avanzar, que muestra los caminos seguros. Cuando eres inconsciente, el miedo es el que te mantiene vivo: “el miedo al fuego te ayudó a no quemarte”. Pero observa tu reacción cuando hay fuego cerca de tu mano: sin pensarlo todo tu cuerpo “reaccionará” protegiéndose. Bueno, Pues volver consciente al miedo, es identificar lo que te hace daño, lo que está distorsionado, lo que te genera disconformidad, en lugar de reaccionar con ira, enjuiciamiento y señalar o castigar, disponte a educar, a darle un propósito, a diseñar un sistema “justo” donde lo inútil se vuelva inútil para todos, pero sobre todo para ti mismo. Sí te vuelves consciente, podrás utilizar el miedo para crear soluciones en lugar de castigos, así la oscuridad tiene un propósito, la lucha se convierte en simbiosis, logrando la homeostasis en todo tu cuerpo, el balance perfecto entre las bajas vibraciones y las más altas. Toda persona que utiliza el miedo para dominar a otros, le usa porque es la única herramienta que conoce. Es un niño con miedo.
Aprende a controlar tu miedo, y serás capaz de traer justicia al mundo. Ahora pregúntate ¿Cuál es tu miedo? ¿Tienes miedo a lo que pensarán de ti, a no ser comprendido, a ser rechazado, a ser olvidado? ¿Cualquiera que sea? utilízalo para expandir tu capacidad de pensamiento, tu capacidad de explicar, tu capacidad de sentirte pleno contigo mismo, tu habilidad para recordar de lo que eres capaz. Ajusta tu propia energía. Los miedos del mundo viven en ti, utilízalos, equilíbralos, toma consciencia de ellos pues te han creado, y encuentra en tu interior la infinita posibilidad de educar a los “injustos”. La única justicia real es la educación del ser. Pues todo ser lleva en su interior un niño con miedo y desajustado.
Busca el origen de tus miedos y ubica en dónde se encuentra ¿ es un miedo de tu cuerpo, es un miedo heredado o un miedo de tu SER?
Pon tu intención en ser justo y educar lo que está en tí. Enfrenta tus miedos y debilidades para encontrarás tus potencialidades.
Yo Soy el Potencial, yo soy el fruto del miedo que ha creado mi vida.
Yo Soy Equilibrio buscando ser Justo.
B. PODCAST.
Relato de cada tema en audio para agilizar su comprensión. Dale clic a la Imagen para ir al episodio
C. VIDEO.
Aquí esta el Resumen en Español de la explicación del Camino YOSOY junto con una meditación (Matías le llama Alineación)
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